Por una Reserva Marina Integral en El Toro

Ayer comenzó la pesadilla para los peces y pulpos de las Reservas Marinas de la Isla del Toro y de las Islas Malgrats. Desde ayer, y durante 6 meses en unos casos y 7 en otros, se puede pescar en uno de los pocos oasis marinos que quedan en Mallorca, en cuanto a vida se refiere.

Somos muchos los que, ya dejando de lado los sentimentalismos (esos peces que llevamos viendo todo el verano, que nos permiten bucear a su lado y nos dejan observar sus comportamientos y fotografiarlos), no entendemos esta figura de “protección”. Estas zonas deberían ser reservas integrales, es decir, deberían estar protegidas durante todo el año. Sobre todo El Toro, pues ha demostrado ser un punto caliente, una zona que responde muy bien a la tregua que se le dio desde que se declaró Reserva Marina, allá por el año 2.004. Restringir la pesca interesa a todos, incluso a los pescadores, pues estas áreas permiten el reclutamiento de nuevos individuos y la exportación de biomasa.

En la Reserva del Toro hay una biodiversidad increíble, desde especies residentes hasta otras que la visitan esporádicamente: serviolas; bacoretas; diversas especies de rayas, algunas muy escasas y en régimen de protección especial, como las mantelinas; peces ballesta… Es una pena que acabemos con este paraíso, que no pensemos más que en el ahora, en lugar de pensar a largo plazo… Sólo hay que reflexionar un poco: ¿qué es más rentable, un pez muerto o un pez vivo?

Aquí dejamos un par de fotos hechas hace unas semanas en Mar Balear. Si seguimos a este paso, quizá en un futuro sea ésta la única manera que tengamos de ver ciertas especies.